6 beneficios de los frutos secos

¿Aún no has incluido los frutos secos en tu dieta? ¿Sigues pensando que te harán engordar porque contienen muchas grasas? Lo cierto es que estas pequeñas delicias son mucho más saludables de lo que piensas y pueden ayudarte a mantener alta tu energía en el día a día y a evitar problemas cardiovasculares, el colesterol, etc.

Los frutos secos son antioxidantes y muy ricos en minerales y fibras. Vamos a hablar un poco más de ellos para que te hagas una idea de todos los beneficios que pueden aportar a tu salud. Así que, sin más demora, ¡vamos allá!

  1. Abundantes en vitaminas como la vitamina B1, B2 y E
  2. Son antioxidantes y contienen muchos minerales como fósforo, calcio, hierro, zinc o magnesio
  3. Son ricos en ácidos grasos esenciales como el omega 3 y omega 6 y también contienen otras grasas muy saludables como el ácido oleico o el linolénico, que ayudan a reducir el riesgo de problemas cardiovasculares y el colesterol.
  4. Contienen la fibra necesaria para ayudarnos a mejorar el tránsito intestinal y también son grandes aliados en las dietas, ya que ayudan a reducir el apetito y son un snack saludable.
  5. Un consumo regular puede ayudar a reducir el riesgo de padecer diabetes, problemas respiratorios o enfermedades inflamatorias como la artritis reumatoide.
  6. Ricos en proteínas y aminoácidos, en especial muy abundantes en arginina que recibe el riesgo de padecer de hipertensión arterial.

Consejos para consumir los frutos secos de forma óptima

Es cierto que los frutos secos son muy saludables y en el párrafo anterior has podido leer muchas de las propiedades que tienen y que son muy buenas para nuestra salud. Sin embargo, como con todo, es recomendable, no es excederse y hacer un consumo moderado. Estos son algunos consejos para consumir adecuadamente los frutos secos:
  1. Como son un alimento que sacia mucho, son ideales en el control del peso. Así que, si estás pensando en ponerte a dieta, puedes seguir consumiéndolos y te ayudarán con la tarea de eliminar esos kilos de más. Pero recuerda, ¡con moderación!
  2. Cuando vayas a comprar tus frutos secos, lo ideal es que elijas aquellos que aún tengan su cáscara. ¿Por qué? Es más fácil comprarlos ya pelados, pero los que aún tienen la cáscara mantienen mejor todas sus propiedades intactas.
  3. La mejor forma de comerlos es crudos (sin tostar) y si tienen piel, con la piel porque es donde guardan algunas de sus propiedades.
  4. Lo mejor es comerlos en crudo y con piel (es ahí donde se concentran sus antioxidantes).
  5. Como son grandes proveedores de proteína vegetal puedes consumirlos de forma moderada después del ejercicio para recuperar energía.

Conclusión

Finalmente, son muchas las recetas en las que puedes incluir los frutos secos para irlos introduciendo poco a poco en tu dieta. Desde pasteles a ensaladas, los frutos secos son muy versátiles y unos grandes aliados en la cocina. ¿Quieres saber más acerca de estos sencillos, pero poderos alimentos? ¡Guárdanos en tus favoritos y visítanos de vez en cuando para conocer nuestras últimas novedades!